Lago de Bracciano y Lago de Martignano: Encanto natural y pueblos
El Lago de Bracciano se encuentra a unos 50 km al norte de Roma, donde la pequeña ciudad homónima de Bracciano está bien conectada por tren con la Ciudad Eterna. En particular, se puede visitar su pequeño centro medieval cerca de su hermoso castillo. El lago es la caldera de un antiguo volcán que estuvo activo hace 400.000 años, y su perímetro es de 31,5 km.
El pequeño Lago de Martignano, que se encuentra al otro lado de una colina a 2 km del lago mayor, está rodeado de naturaleza y es apreciado para el baño, con algunas instalaciones gratuitas en el sur y de pago en el norte.
Son destinos frecuentados por los romanos por sus escasas playas, los pequeños pueblos como Bracciano, Anguillara Sabazia y Trevignano, así como algunos senderos para caminar o andar en bicicleta.
También cabe mencionar Monterano, un sugerente pueblo fantasma situado a unos 10 km de Bracciano, con vestigios de época barroca ubicados en una reserva natural.
Valle del Treja: Parque natural y patrimonio
Al noreste del Lago de Bracciano, al sur de la Tuscia, el Treja es un pequeño río cuya valle está protegida dentro de un parque natural. Sus aguas excavaron el toba —abundante en la región— durante milenios, creando parajes pintorescos. En el norte del parque se alza el auténtico y pequeño pueblo de Calcata, encaramado en un promontorio dentro de un entorno espectacular. Las aguas del río están bordeadas de bosques y forman, en algunos puntos, cascadas, entre ellas las cascadas de Monte Gelato (que fueron escenario de rodaje de una película de Trinità de la época del spaghetti western). Entre los sitios y curiosidades, cabe mencionar el pueblo de Mazzano Romano, el oppidum de la antigua ciudad falisca de Narce (los faliscos fueron un pueblo cercano a los etruscos), necrópolis etruscas, molinos abandonados, etc. Senderos señalizados permiten descubrir el parque.
Mapa de sitios a explorar
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