Hay muchas panaderías (panificio en italiano) en Roma, ya que el pan ha sido durante siglos un alimento central en la vida de los romanos. Son los forno (hornos en francés) quienes lo hornean tradicionalmente. Esta denominación no es hoy en día sistemática. Allí se encuentra una gran variedad de panes (incluso en los supermercados), a menudo en forma de hogaza y de buena calidad, incluidos panes con cereales, higos, nueces y a veces con masa madre de fermentación lenta. Además, los forno preparan a menudo también con su masa pizzas al corte, en particular la marinara (pizza roja) y la pizza bianca (pizza blanca), y en cuanto a las galletas, las clásicas crostate (tartaletas). Durante la temporada navideña, suelen preparar el popular bollo con pasas y/o frutas confitadas, el panettone.
Las pastelerías (pasticceria en italiano) a veces están asociadas a una panadería. También son muy numerosas en Roma, donde se pueden encontrar desde galleterías históricas hasta reposteros originales que experimentan con nuevos pasteles. También hay muchos artesanos de diversas regiones de Italia, incluidos los napolitanos y sicilianos, que deleitan con sus pasteles deliciosos y generosos.
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El Forno Roscioli es una famosa panadería-trattoria fundada en 1972 y apreciada por sus buenas pizzas romanas para llevar, de masa fina y crujiente, para las que a menudo hay que hacer cola a la hora del almuerzo. Bueno, claro que hay un buen pan, pasteles y también galletas.
El Forno Conti & Co es una pequeña panadería artesanal muy buena del barrio de l'Esquilin, donde se puede degustar buen pan, pasteles y bollos, tomar café o desayunar. Simple y eficaz.
En el ghetto histórico de Roma, esta pastelería tradicional kosher ofrece excelentes productos tradicionales que no se encuentran en ningún otro lugar de Roma.
SAID es una chocolatería artesanal desde 1923, así como tienda y restaurante, situada en un pequeño callejón del barrio San Lorenzo. Uno puede instalarse cómodamente en un ambiente acogedor, por ejemplo para disfrutar de un buen chocolate caliente.
Giolitti es un histórico heladero y pastelero romano, fundado en 1890. Sus helados son famosos, ofreciendo más allá de los sabores clásicos, originales como ricotta, champán, marsala, arroz, etc.
Situado en Campo de' Fiori, este antiguo Forno de la plaza del mismo nombre, además de pan y pastelería, ofrece muy buenas pizzas al corte y focaccia, como pizza bianca, pizza rossa o margherita.
El Forno Roscioli es una famosa panadería-trattoria fundada en 1972 y apreciada por sus buenas pizzas romanas para llevar, de masa fina y crujiente, para las que a menudo hay que hacer cola a la hora del almuerzo. Bueno, claro que hay un buen pan, pasteles y también galletas.
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